Esta sensación, es percibida de la misma manera por niños, jóvenes, adultos y adultos mayores; quienes en un momento dado, al volver la mirada comentan e invitan a sus acompañantes.” Mira qué bonito”, “que colores tan bonitos”, “wau mira ese paisaje”. Y es que es realmente un regalo a la mirada observar cómo, cambia el mismo paisaje a lo largo del día.
Bien dicen que ”una imagen dice más que mil palabras” y muestra de esto es la fotografía que acompaña este articulo, tomada a las seis de la mañana ( con un celular con cámara de baja resolución), después de dos días de intensas lluvias, recordándonos que después de la tormenta viene la calma y que siempre habrá un nuevo amanecer con la esperanza de mejores tiempos. Esto es Shambala y está en Venezuela